
Nuestro lema "Freedom in Motion" también se aplica a nuestro compromiso social: Somos orgullosos patrocinadores de los extraordinarios deportistas de élite Anna Schaffelhuber y Gerd Schönfelder.
A pesar de la paraplejia y la amputación, han conseguido alcanzar un rendimiento deportivo absolutamente impactante en la modalidad de esquí alpino, con un asombroso palmarés de medallas y galardones. Gracias a su enorme motivación y su incansable espíritu de lucha, son sin duda un ejemplo para muchas personas con discapacidad física.
La deportista alpina Anna Schaffelhuber es parapléjica de nacimiento y depende de una silla de ruedas. Pero esto no ha impedido a la actual estudiante de prácticas lograr una exitosa carrera deportiva como competidora en bob monoesquí. Su primer triunfo le llegó a esta deportista natural de Ratisbona cuando tan solo tenía 15 años.
Durante cinco años consecutivos ganó la Copa del Mundo de Esquí alpino para deportistas discapacitados, y en la 11ª edición de los Juegos Paralímpicos de Invierno de Sochi en 2014, ella sola se bastó para ganar cinco medallas olímpicas. Por si esto fuera poco, ha sido galardonada tres veces como Mejor Deportista Paralímpica del Año, y en 2010 consiguió por primera vez el Laurel de Plata, máximo reconocimiento deportivo de Alemania.
Por todo esto y mucho más, Anna Schaffelhuber es una de las mejores deportistas de esquí alpino del mundo.
"El deporte de minusválidos ha ido evolucionando lentamente hasta alcanzar la categoría profesional. Mientras que los deportistas no discapacitados pueden contar con un amplio respaldo, los deportistas discapacitados luchan cada día para poder conciliar su profesión, estudios o formación con sus complejos entrenamientos", afirma Uwe Schettler, gerente de Juzo.
Con nuestro compromiso queremos facilitar la vida a estos deportistas y ayudarles a aprovechar al máximo su extraordinario potencial.
Uwe Schettler
El ex-esquiador Gerd Schönfelder es hasta ahora el deportista más exitoso de la Historia de las Paralimpiadas. En 1989, un accidente arrebató a un Gerd de tan solo 19 años su brazo derecho y parte de la mano izquierda.
Desde 1992 ha participado en varios Juegos Paralímpicos de Invierno, consiguiendo 16 victorias y un total de 22 medallas, consiguiendo además un más que respetable cuarto puesto en los campeonatos mundiales. Ha sido reconocido en varias ocasiones como Mejor Deportista Paralímpico del Año, ha sido galardonado en cuatro ocasiones con el Laurel de Plata y además ha sido nombrado Hijo Predilecto de su ciudad, Kulmain (Alto Palatinado, Alemania).